Commitments and Constraints: Roadblocks to Certification in ECE

agosto 20, 2024

El Concilio quiere dar a nuestros maestros de educación infantil la oportunidad de contar sus historias. Usma Mohamed, vicepresidenta de Experiencia de Marca y Marketing del Concilio, quiere transmitir lo que ellos tienen que decir en su tesis doctoral: Percepciones de los maestros de educación infantil no certificados sobre las certificaciones de educación infantil: un estudio de investigación narrativa cualitativa. El estudio reciente de Usma es una importante contribución, ya que nuestro país sigue enfrentándose a una escasez de maestros de educación infantil calificados. Y es un problema que tiene un gran impacto en los niños, como señala Usma. Los maestros con capacitación especializada en educación infantil están mejor equipados para ayudar a los niños a aprender en la etapa más formativa de la vida, y el andamiaje de aprendizaje que estos maestros brindan tiene un impacto a largo plazo.

Pero la historia es diferente en comunidades de bajos ingresos como el Valle Bajo del Río Grande de Texas, donde Usma llevó a cabo su investigación en el campo. La región tiene programas de aprendizaje temprano de menor calidad que las partes más ricas del estado. Y no es única. Texas ha cumplido solo cuatro de los diez parámetros de calidad para la educación infantil, según lo definido por el Instituto Nacional para la Investigación de la Educación Infantil (NIEER, por sus siglas en inglés). Y el déficit es especialmente grave cuando se trata de maestros asistentes. En Texas, como en otros estados, las calificaciones para maestros asistentes no cumplen con los criterios recomendados por el NIEER, como tener una Credencial™ de Asociado en Desarrollo Infantil® (CDA) o una certificación similar.

La falta de asistentes docentes o educadores calificados es motivo de preocupación, como señala Usma, ya que los asistentes docentes desempeñan un papel vital en los ambientes de educación infantil, a menudo compartiendo las responsabilidades en el aula con los maestros principales. Y los asistentes docentes no calificados son especialmente comunes en áreas, como el Valle Bajo del Río Grande, que tienen grandes poblaciones minoritarias, altas tasas de pobreza e ingresos per cápita más bajos. Áreas como el Valle Bajo del Río Grande también tienen programas de educación infantil de menor calidad que las partes más ricas del estado, y eso es un obstáculo mientras la región se esfuerza por mejorar los programas de educación infantil, preparar a los niños para el éxito y, en última instancia, reducir los niveles de pobreza. Es cierto que la región está ampliando el acceso a los programas de educación infantil, pero lucha por aumentar su calidad debido a la escasez de maestros certificados.

Usma exploró las razones de este obstáculo a través de entrevistas en profundidad con siete maestros no certificados en un centro preescolar en el Valle Bajo del Río Grande. Estos maestros transmitieron sus pensamientos al compartir sus experiencias vividas para descubrir perspectivas que respaldaran las siguientes preguntas: ¿Qué percepciones tienen los maestros de educación infantil no certificados sobre la capacitación para la certificación? ¿Cuáles son las percepciones de los maestros no certificados sobre el grado en que la certificación de educación infantil agregaría o no a sus conocimientos y habilidades? ¿Y cómo perciben los maestros no certificados su capacidad actual para enseñar a los niños de manera eficaz?

Las historias que compartieron los maestros revelaron factores tanto personales como profesionales que los disuadieron de obtener credenciales como el CDA®. Los obstáculos para la certificación, como aprendió Usma, incluyen las limitaciones de tiempo, la dificultad percibida de la certificación, la falta de conocimiento de las credenciales y una confianza tan alta en sus habilidades docentes que los maestros no sentían que necesitaban capacitación. Además, el fuerte apoyo de los colegas y la importancia de sus deberes familiares hicieron que los maestros cuestionaran los méritos de obtener credenciales de educación infantil. Sin embargo, no cuestionaron el valor de su profesión. Las historias que compartieron revelaron la pasión, el orgullo y el sentido de compromiso que aportaron para servir bien a los niños pequeños.

Algunos maestros incluso reconocieron que obtener una credencial o certificación de educación infantil los ayudaría en su trabajo. Y es importante que los líderes educativos también reconozcan los factores que pueden impedir que muchos maestros de educación infantil persigan este objetivo. Comprender el contexto de su vida diaria y las percepciones de la capacitación especializada es crucial para aumentar la cantidad de maestros de educación infantil certificados. Y es especialmente urgente para las comunidades marginadas tanto en Texas como en otros lugares.

Esto será un desafío para los educadores y para quienes los apoyan. Aun así, el esfuerzo vale la pena. Los educadores con credenciales producen mejores resultados para los niños, según los numerosos estudios que cita Usma. Y ella ofrece recomendaciones que pueden ayudar a reducir los obstáculos que enfrentan los maestros de educación infantil para obtener credenciales. Por ejemplo, los estados y las localidades pueden crear una fuerza laboral más calificada mediante el uso de subvenciones en bloque y fondos para ayudar a los educadores a obtener una certificación o credencial de educación infantil. Los directores de los centros pueden instar a los maestros a que hagan de las credenciales una prioridad y mostrarles cómo mejorarían sus habilidades docentes. Las organizaciones de acreditación pueden proporcionar fundamentos detallados de la importancia de la certificación de maestros. Y las organizaciones de certificación pueden adaptar su alcance para resaltar los beneficios específicos para los centros, los maestros y los estudiantes.

Los estudios futuros deberían explorar incentivos para que los maestros no certificados busquen la certificación en todo el país. Y estos esfuerzos deberían tener en cuenta los desafíos y las historias de la vida real de los maestros, como los que Usma escuchó. Sus ideas contribuyen a comprender por qué más maestros no obtienen credenciales, las formas de ayudarlos a tener éxito en hacerlo y por qué es tan importante. Es cierto que los maestros de educación infantil se enfrentan a otros compromisos y limitaciones de tiempo, pero Usma insta a los responsables de las políticas y a los líderes de la educación a encontrar formas de ayudar a más maestros a obtener credenciales por el bien de aquellos a quienes sirven. Los maestros de educación infantil calificados, como señala, tienen las habilidades para ayudar a los niños pequeños algún día a contar sus propias historias de éxito.

 

 

 

 

 

 

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